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| Documento desclasificado de la CIA, notese la gran cantidad de texto todavía censurado, aquella información podría resultar en pleno 2019 sensible para todas las partes involucradas |
El documento desclasificado de la CIA donde se alerta de la posible alianza militar propuesta por Colombia a Ecuador, para atacar al Perú.
Antes de contar la historia de estos hechos de 1949, vamos a analizar rápidamente y exponer este archivo desclasificado sobre una posible "Alianza Militar" propuesta por el Gobierno colombiano, para crear una coalición junto a los ecuatorianos y atacar al Perú, en ese año un refugiado político del partido político APRA (Alianza Popular Revolucionaria Americana) se refugió en la embajada colombiana en Lima, lo que causó malestar en la dictadura militar peruana de ese entonces, tanto así que se temía de un asalto a la Legación diplomática.
Un documento que era confidencial
Traducción al español por Revisionismo Histórico del Ecuador:
1. Después de su retorno de Bogotá el 21 de febrero de 1949, Galo Plaza Lasso, Presidente del Ecuador, le contó a un amigo que había discutido un asunto de una alianza militar secreta con el Presidente de Colombia. Plaza citó al Presidente Mariano Ospina Pérez de Colombia que dijo: "Las dificultades entre Colombia y Perú solo pueden ser solucionadas por la fuerza, y como Perú es un enemigo común del Ecuador y Colombia, los dos países deberían unirse en este problema". Se reporta que Plaza no comprometió a su país en alguna alianza, pero aceptó verbalmente con Ospina Pérez la idea de formar una coalición. El Presidente de Colombia alegó que espera problemas con el Perú, si no es inmediatamente, entonces será lo más pronto posible inicie una guerra entre Estados Unidos y Rusia.
2. Reservadamente, después de la mencionada conversación, el mismo amigo de Plaza mencionó lo siguiente, que es reportado porque posiblemente refleje en los propios pensamientos de Plaza: "En el caso que Colombia y Ecuador se vean envueltos en una guerra con Perú, ellos verán por sus países hermanos de la Gran Colombia, Venezuela, para la ayuda de créditos, armas y suministros. Es probable también que Bolivia sumarse debido a su cercanía con los países bolivarianos.
3. De la visita presidencial de Plaza a Colombia, la mayor parte de la discusión fue dada a la alianza militar secreta entre Ecuador y Colombia. Varios miembros de los altos mandos de las Fuerzas Armadas ecuatorianas se comunicaron en privado con el Ministro de Defensa a inicios de febrero de 1949 con el proposito de alentar al Ministro a prevalecer frente al Presidente para discutir tal alianza con Ospina Pérez. Estos oficiales, al igual que oficiales del alto mando en Guayaquil, creen que Perú podrían provocar ataques en Colombia y Ecuador, con el fin de dirigir la atención de su situación interna y ganar más territorio, y que la defensa del Ecuador yace en su unión con las fuerzas de Colombia.
4. El Partido Conservador de Ecuador también aprovó las conversaciones del tratado entre los dos presidentes. El 9 de febrero de 1949 Rafael Florencio Arizaga, líder del Partido Conservador y miembro de la Junta Consultiva, fijó que el Partido tomó una posición favorable frente a la autorización de Plaza para discutir una alianza militar con Colombia, pero que bajo ninguna circustancia se permitirá concluir o firmar alianza alguna para el Gobierno ecuatoriano sin primero cumplir con los requerimientos constitucionales.
5. Se reportó que Plaza Lasso particularmente no esta entusiasmado con hacer un viaje a Colombia debido a la delicada situación política entre Colombia y Perú. Sin embargo, según Clemente Yerovi Indaburo, Ministro ecuatoriano de Economía, los colombianos insistieron sobre Plaza de que mantenga su promesa de visitar su país debido al entusiasmo de formar una alianza militar.
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| Momentos en que el Sr. Carlos Julio Arosemena Tola entrega la banda presidencial al Presidente del Senado, Sr. José Rafael Bustamante durante la trasmisión de mando. El acto es observado atentamente por el Presidente electo Sr. Galo Plaza Lasso y por los doctores Carlos Andrade Marín y Abel Gilbert, Presidente de la Cámara de Diputados y Vicepresidente del Senado, respectivamente. |
Análisis Revisionista: ¿Quién disuade a quién?
Al parecer las autoridades colombianas temían enfrentar solos al Perú, por lo que solicitaron al Ecuador formar una alianza para "disuadir" a los peruanos, es increíble de creer que el Gobierno colombiano con su poderío militar de 1949 no haya podido, ni considerado batirse solos en una guerra frente a los peruanos, sino que solicitó al Gobierno ecuatoriano formar una "Alianza Militar".
Ecuador "tenía la sangre en el ojo" contra los peruanos por los hechos de 1941, pero aun así y pese el entusiasmo de la clase militar, el Presidente Galo Plaza Lasso descartó tal alianza y pospuso indefinidamente su visita a Colombia, ya que ese país estaba en tensiones con el Perú por un asilado político en la embajada colombiana en Lima.
Como los intereses colombianos se vieron comprometidos en 1949 y en vez de enfrentar en solitario al Perú, solicitó ayuda al Ecuador, para convertilo "en su caballo de guerra" mientras ellos "tras las sombras" habrían convertido a Sudamerica en un nuevo campo de batalla.
En 1941 los intereses colombianos nunca se vieron salpicados, su Gobierno nunca le propuso a nuestro país una alianza militar, o algún tipo de ayuda económica o militar (crear un segundo frente de batalla) mientras nuestras fuerzas se batían contra los peruanos en El Oro, igualmente el Gobierno de Carlos Arroyo del Río no fue con la "cola entre las patas" a pedir ayuda al Gobierno colombiano de ese entonces.
Nuestro poderio militar se había incrementado considerablemente desde 1942, pero en una inteligente decisión del Presidente Galo Plaza Lasso descartó la idea y dejo plantado a los colombianos tras la "indecorosa propuesta", todo pese al entusiasmo y presiones de nuestra clase militar, la posición de esta última entendible debido al ambiente de pre-guerra y el nuevo concepto de seguridad nacional.
Hubiese sido un sin sentido embarcarnos en una guerra por un asunto diplomático entre Colombia y Perú, y nosotros figurar como los oportunistas que no pueden enfrentar a un adversario en una pelea limpia de uno contra uno.
Hubiese sido un sin sentido embarcarnos en una guerra por un asunto diplomático entre Colombia y Perú, y nosotros figurar como los oportunistas que no pueden enfrentar a un adversario en una pelea limpia de uno contra uno.
