Francisco Luis Héctor de Carondelet |
La historia del Barón de Carondelet, de Gobernador de Luisiana y la Florida española, a Presidente de la Real Audiencia de Quito.
Francisco Luis Héctor de Carondelet, V barón de Carondelet, vizconde de Langle, vizconde de la Herstre, señor de Hayne-Saint-Pierre, caballero de la Orden de Malta (Noyelles-sur-Selle, Francia, 1748-Quito, Virreinato de Nueva Granada, 1807) fue un noble, militar y gobernador colonial al servicio de España. Fue intendente de San Salvador desde 1789 a 1791, gobernador de Luisiana y la Florida Occidental de 1791 a 1797, y presidente de Quito desde 1797 hasta su muerte en 1806.
Biografía
Nació en la villa de Noyelles-sur-Selle, en el territorio flamenco que anteriormente había pasado a control francés tras la Guerra Franco-Holandesa. Antes de eso, durante el dominio español de los Países Bajos, los Carondelet habían servido a la monarquía hispánica como militares. Francisco Luis Héctor nació en 1748 y era hijo de Juan Nicolás Chislain, IV barón de Carondelet y de Noyelles, y María Angelina Bernarda de Bosoist, vizcondesa de Langle.
En virtud de los Pactos de Familia, que posibilitaron la incorporación al ejército español de muchos franceses, con quince años ingresó como cadete en la guardia valona. En 1775 participó en la expedición de Argel. En 1783 fue Jefe de la IV División en la Batalla de Pensacola. En 1787 regresó a España y fue nombrado Caballero de la Orden Malta.
Matrimonio y descendencia
En 1777 contrajo matrimonio con María Concepción Castaños Aragorri Uriarte y Olavide, nacida el 8 de agosto de 1759 en La Coruña y fallecida el 13 de septiembre de 1831, que era hermana del I duque de Bailén. Tuvieron dos hijos:
Luis Ángel de Carondelet y Castaños (1787-1869), II duque de Bailén y VI barón de Carondelet. Casado en 1813 con María Gertrudis Donado García. Con descendencia.
Como Intendente de San Salvador, trató de reorganizar las milicias, de proteger a los consumidores regulando los pesos y medidas usados por los vendedores y trató de regular las venta de tierras de realengas y de poner impuestos a los ladinos de la ciudad de San Salvador para construir caminos y cárceles; también estableció escuelas primarias y de artesanías.
Carondelet intentó atraerse a las comunidades de colonos de origen británico que se establecieron en la banda occidental del río Misisipi, en particular las de la zona del Kentucky, con el fin de evitar su inclusión en los Estados Unidos. Su propósito era frustrar la política de los Estados Unidos negándole el acceso al río Misisipi, una tendencia que siguieron otors funcionarios coloniales españoles al temer por la seguridad de la Luisiana Española y toda la Nueva España. Tal estrategia política prácticamente llegó a su fin con la ratificación en 1795 del Tratado de Pinckney, también conocido
como Tratado de San Lorenzo de 1795.
Presidente de Quito
Desde 1799 se desempeñó como presidente de la Presidencia y Real Audiencia de Quito, cargo que ejerció hasta su muerte en 1807. En Quito, promovió varias obras urbanas, como la reedificación del viejo palacio Real, sede de los presidentes de la Audiencia, que encargó al arquitecto español Antonio García en 1801. El nuevo edificio es conocido actualmente como Palacio de Carondelet en su honor y actualmente es el palacio presidencial ecuatoriano. Dispuso también la remodelación del acceso principal de la Catedral Metropolitana de Quito, levantando un atrio en forma de templete neoclásico rematado con una cúpula.
El sábado 4 de febrero de 1797, la ciudad de Riobamba, ubicada a 200 kilómetros al sur de Quito, fue destruida por un terremoto. Carondelet emprendió durante su gobierno la reconstrucción de la ciudad, ubicándola en su actual emplazamiento en la llanura del Tapi, al sur del volcán Chimborazo. Durante la etapa de Carondelet se fue fraguando lo que posteriormente sería la Revolución del 10 de agosto de 1809, que dio como resultado el primer gobierno autónomo en la América española.
Tras su muerte, sucedida en la ciudad de Quito durante el mes de agosto de 1807, fue sepultado en la bóveda de canónigos de la Catedral Metropolitana de esa ciudad. Sería sucedido en la Real Audiencia por Manuel de Urriés, conde de Ruiz de Castilla.
El Palacio de Carondelet fue construido durante su administración como Presidente de la Real Audiencia de Quito |
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Deja tu comentario