viernes, 21 de diciembre de 2018

¿El Perú siempre pierde, así hayan ganado las guerras?

Durante la campaña militar del Cenepa la superioridad ecuatoriana estaba sobre la mesa, y tras años de amenazas de un nuevo conflicto armado, el poderío bélico peruano fue inferior en estrategias y resultados. Foto cortesía Jenner Baquero

La prensa peruana, siempre objetiva e imparcial a la hora de informar los hechos diplómaticos y militares con el Ecuador, resalta la perdida territorial que sufrieron tras la suscripción del Tratado de Rio de Janeiro.

Fue muy importante la derrota militar peruana en el Cenepa para cerrar el siglo y el ciclo de enfrentamientos con un revisionismo a su propia historia por parte de sus medios de comunicación.

A continuación vamos a reproducir dos artículos que fueron publicados en diarios peruanos después de la derrota militar en el Alto Cenepa:

Diario Expreso 1995

El periodista Mario Miglio escribía el 23 de febrero de 1995 en “Expreso”, que el Perú tenía en la actualidad la mitad de los territorios que tenía cuando surgió a la vida independiente, pues había perdido territorios con todos sus países limítrofes.

Hacía recordar que antes de 1941, todos los mapas oficiales del Perú, elaborados por el Instituto Geográfico del Perú y por el propio Ejército; que se usaban para educación en los cuarteles y locales públicos eran muy diferentes a los que empezaron a circular después de la firma del Protocolo de Río de Janeiro. 

Recuerda el periodista, que en esa época era estudiante secundario y se les había mostrado otra realidad de la frontera con Ecuador. La línea fronteriza desde los límites con Colombia, caía casi en forma vertical y dejaba dentro del Perú, las nacientes de todos los ríos tributarios del Marañón. 

Es decir que se nos había mantenido en el engaño, y no supimos que el Protocolo de Río, se concretó a formalizar el status quo que regía desde 1936  -en época de Benavides- y que el gobierno nunca hizo de dominio público. 

Entre los mapas peruanos anteriores a 1941 y los del Protocolo hay una diferencia de 170 000 kilómetros cuadrados en nuestra contra y en 1941, nuestros soldados lucharon y murieron en defensa de un territorio que suponíamos nuestro.  Y pese a eso, todavía Ecuador decía haber perdido 200 000 kilómetros cuadrados.

Statu quo que se delimitó tras el Acta de Lima de 1936. Mapa tomado del libro "La invasión peruana y el Protocolo de Rio" de Julio Tobar Donoso 


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El Virreinato del Perú como sucursal del Imperio Español en Sudamérica había logrado someter y administrar a las provincias que formaban sus dominios en la región, el Perú como República intentó retener todos los territorios que menciona el autor del artículo, pero sin la presencia realista, muy dificil lograr tal objetivo.

El último intento de "colonialismo español" fue en 1941, cuando se pretendió a la fuerza retener los territorios que figuraban en los mapas peruanos a la época, objetivo que se ve frustrado tras la negociación final del Tratado de Rio de Janeiro.

Sobre la muerte de peruanos que defendieron territorio que suponían de ellos, esa culpa debería recaer sobre los líderes peruanos que arrastraron a todo un pueblo a los caprichos de unos cuantos, que mientras separaban familias legitimamente peruanas y las exiliaban a Estados Unidos, la cortina humo fue el "alevoso" Ecuador, que atacó a los peruanos y hasta había convertido las calles de Santa Rosa "en verdaderos arsenales" para agredir al Perú.

Sobre el acuerdo de "statu quo", en la actualidad sigue siendo un tema que el Gobierno peruano no ha hecho de dominio público y de alguna forma se sigue manteniendo en el engaño a sus ciudadanos.


Diario Correo 1995

El 12 de marzo de 1995, el periodista limeño Víctor Errea S., escribía en “Correo” de Lima, que Ecuador había perdido la guerra y que había ganado 70 000 km2  de territorio, más del que venía ocupando, lo que incluía también el llamado triángulo de Sucumbios que el Perú había recibido como ridícula compensación de Colombia por el extenso trapecio de Leticia que Leguía regaló a Colombia. 

El Perú siempre había exigido que se respetara la Real Cédula de 1802 de acuerdo a la cual el territorio de Ecuador estaba ubicado entre el mar y la cordillera occidental de los Andes, teniendo como línea limítrofe una recta perpendicular que nacía en Sucumbios y terminaba en el río Chinchipe dejando para el Perú, los territorios donde nacían todos los afluentes del Marañón. 

Durante el siglo XIX el Perú había estado en posesión de todos esos territorios selváticos, hasta que en 1882 en que Ecuador aprovechando que estábamos en guerra con Chile, envió tropas al Alto Napo y fundó una guarnición, iniciando así un lento proceso de infiltración. 

En el territorio ganado por Ecuador en 1942 se encuentran los ricos yacimientos petrolíferos de Lago Agrio que después rebautizaron los ecuatorianos como Nuevo Loja de donde han estado extrayendo cuatrocientos mil barriles diarios de petróleo. 

En los territorios ganados por Ecuador en el Protocolo de Río de Janeiro han creado las nuevas provincias de Napo, Pastaza Morona-Santiago y Zamora-Chinchipe.

Como hemos dicho antes, el Perú permitió que Ecuador siguiera infiltrándose en las nacientes de los ríos amazónicos, con la pasividad peruana y para colmo el 16 de julio de 1936 se suscribe el Acta de Lima que firmaron de parte del Perú el Canciller Alberto Ulloa y por Ecuador el Ministro Plenipotenciario de Ecuador en Lima, Homero Viteri Lafonte y se estableció un statu quo, de acuerdo al cual Ecuador seguiría ocupando las nacientes de los ríos donde ya se había infiltrado, aún cuando las pretensiones de Ecuador eran mucho mayores y deseaba llegar hasta el Marañón.

El status quo de 1936 sirvió de base para la elaboración del Protocolo de Río de Janeiro, pero a los peruanos se ocultó desde 1936 dicho status quo, y se nos hizo creer que detentábamos los territorios a que hacía referencia la Cédula Real de 1802.

De acuerdo con el statu quo de 1936, los límites con el Ecuador  en el sector de Piura-Tumbes, eran: Boca de Capones en el Pacífico; tierra adentro por el Zarumilla, Alamor y Macará.

La guerra del Pacífico, también conocida como guerra del Salitre, fue un conflicto armado acontecido entre 1879 y 1883 que enfrentó a Chile contra los aliados Bolivia y Perú. La guerra se desarrolló en el océano Pacífico, en el desierto de Atacama y en las serranías y valles peruanos.


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La ridiculez de las autoriades peruanas que no respetaban los Tratados se evidencia cuando se van a la guerra sin una estrategia clara, suena hasta chistoso, pero el Perú como República reclamaba hejemonía donde la tenía, y peor aún, basado en documentos que representaban al Imperio Español.

Ecuador parece ser el culpable de todos los males ajenos, y la Guerra del Pacífico no se queda atrás, mientras unos se batían en guerras, según este periodista, empezaba una lenta infiltración ecuatoriana.

Lo único que medio tiene claro en toda la película son los barriles de petróleo que Ecuador extrae de esa zona, imaginemos cómo estará ahora Victor Errea si se entera que Petroecuador le está vendiendo más de 7 millones de barriles a Petroperú.

Así como repiten hasta el cansancio "Una vez que firmamos el Tratado, devolvimos todo lo conquistado" deberían repetir el nombre del Presidente y Canciller peruano que suscribieron el Acta de Lima, y dejar de culpar al Ecuador por todos los muertos que el Perú tuvo que poner para conquistar parte de la provincia de El Oro en 1941.

El Alto Napo a finales de 1890, durante las misiones de los padres jesuitas en el Oriente ecuatoriano, las expediciones salían de Quito y no tenían que pedir permiso a ningún peruano y peor todavía, cruzar algún puesto fronterizo vecino.


11 de Septiembre de 1941: Emboscada de Cune

Soldados ecuatorianos antes de partir al frente. Los soldados de este pelotón inspirarían el filme ecuatoriano "Mono con Gallinas&qu...